Como sabéis y os conté aquí en el blog, este año tuve la oportunidad de viajar a Tailandia, nos fuimos 22 días al país de las sonrisas y el punto de partida, no pudo ser otro que aterrizar en Bangkok. Hacíamos una parada breve de un sólo día en la ciudad, donde nos alojamos en el Hostal Sunflower Place, para al día siguiente coger el vuelo a Koh Tao, dónde bucearíamos durante cinco días.

El hostal Sunflower Place está muy bien ubicado, a tan sólo 10 minutos de la estación de metro Sala Daeng, una de las estaciones de BTS situadas en el centro de la ciudad, en la parte sur.

El hostal cuenta con wifi gratuito en todas las habitaciones, además de baño en cada una de ellas. Está pensado para que los huéspedes se sientan como en casa y aunque el hostal es muy sencillo, os podemos asegurar que estaba limpísimo. La atención excelente y muy hospitalarios.

 
Esta situado en una de las calles perpendiculares a Silom Road, una de las calles más famosas de Bangkok con una longitud de 2’5km que empieza en el famoso Parque Lumpini, dónde los bangkokianos hacen deporte y del que ya os hablaré más tarde, y termina cerca de Río Chao Praya, así que ya sabéis, encontráis mucho tráfico y todo tipo de transportes, autobús, taxis, tuk – tuk.
 

 

También se encuentra cerca el Hospital Christian para que os sirva de referencia y tenéis cerca todo tipo de servicios con miles de tiendas, restaurantes locales, bares y restaurantes internacionales. Otro tip a destacar es el mercado nocturno Patpong, dónde como en todos los mercadillos del país os tocará regatear para conseguir el mejor precio, ya sabéis, de lo que os digan siempre la mitad y ya habrá tiempo para subir, no consiste tampoco en racanear hasta el céntimo, intentar hacer el ejercicio del cambio y veréis como no es tanto dinero el que os gastáis ;)