Cada verano llegan los festivales a todas las ciudades europeas, festivales en los que tenemos la oportunidad de disfrutar de nuestros grupos de música favoritos y, Bergen no podía ser menos, así que en nuestro viaje acudimos al Bergenfest.

El Bergenfest se ha celebrado este año entre los días 12 al 15 de Junio y ha contado con un gran cartel de artistas invitados como Imagine Dragons, uno de mis grupos favoritos, Mark Knopfler, Jaime Cullum, Amy Macdonald entre otros mucho que podéis ver en la web y tuvimos la suerte de disfrutar y de artistas noruegos que nos sorprendieron gratamente como fueron Susane Sundfor o Hoffmaestro, los cuales se han convertido en uno de mis grupos de cabecera.

El festival se celebra con la llegada del buen tiempo y tiene lugar en la fortaleza de la ciudad, una de las más antiguas y mejor conservadas de Noruega. Su historia se remonta a la Edad Media, la cual a mediados del siglo XIII fue la sede real de Haakon IV. La Fortaleza alberga numerosos edificios históricos como Hakonshallen, que  se construyó en 1261 para celebrar la boda y coronación de su hijo Magnus Lagaboter o la Torre Rosenkrantz del año 1500.

Aunque el festival se celebra en su interior, lo que se utiliza son sus jardines que se reparten en en tres aéreas para distribuir al público: El espacio más grande donde se ubica el escenario principal con una capacidad de 6.700 espectadores, otro espacio al aire libre llamado Bastion, y una uno más pequeño interior llamado Magic Mirrors, que parecía un remolque de circo, con un decoración muy curiosa. Otros conciertos, tenían lugar en salas repartidas por la ciudad.

Quieren conseguir un festival ecológico y para ello tienen muy en cuenta la gestión de los residuos (reciclando los mismos), energía, transporte, abastecimiento y consumo. Tengo que decir que me llamo la atención lo bien organizado que estaba, en cuanto a la distribución de los espacios para la restauración, los aseos siempre hasta arriba, como en todos los festivales y un espacio para discapacitados habilitado con rampas.

Si tenéis pensado viajar a Bergen, no perdería de vista este festival que se celebra en un enclave único.